Prefacio

Íbamos corriendo por el bosque, a gran velocidad dejándonos llevar por el aroma de los venados estaba eufórica tenia demasiada sed, fue entonces que mama paro de súbito,  oí que hablaba con papa por el celular y  en unos instantes cayo inconsciente no sabia que hacer solo oía a papa del otro lado del celular cuando sentí que una corriente de electricidad pasaba por mi cuerpo, mientras  me hundía en la inconsciencia y el frió que me embargaba para despertar en un lugar que no tenia ni idea y con lo que temí desde meses atrás. No podía ser cierto, esto no era la verdad era una de las peores pesadillas cumplidas en carne y hueso. Sabia de antemano que íbamos a morir.